La celebración del Día de la Madre se vio empañada por un alza significativa en los precios de los pasajes en el terminal terrestre de Arequipa, donde las familias que buscaban reunirse con sus seres queridos se encontraron con tarifas que superaban en algunos casos hasta el 100% de su valor habitual.
Un golpe al bolsillo
Desde el viernes por la tarde, la afluencia de pasajeros comenzó a aumentar en el terminal terrestre, presagiando un fin de semana de gran movimiento por la festividad. Sin embargo, la alegría de los viajeros se vio truncada al encontrarse con precios exorbitantes para los pasajes a diversos destinos del país.
En el caso de Cusco, el costo del pasaje económico se disparó a 50 soles, cuando en condiciones normales oscila entre 30 y 40 soles. Un incremento similar se observó en la ruta a Lima, donde el pasaje económico se comercializó entre 80 y 100 soles, mientras que su precio habitual se encuentra entre 60 y 70 soles.
Los destinos más cercanos tampoco se salvaron del alza. El pasaje a Puno fluctuó entre 40 y 50 soles, duplicando su precio normal de 30 soles. En tanto, el viaje a Tacna alcanzó los 50 soles, cuando antes se podía encontrar por entre 30 y 40 soles.
Conforme avanzaban las horas del sábado, la situación no hizo más que empeorar, con precios que continuaban subiendo en respuesta a la alta demanda. Las familias, muchas con presupuestos ajustados, se vieron obligadas a reconsiderar sus planes o a pagar precios excesivos para poder celebrar juntos este día especial.
Malestar entre los usuarios
Este incremento injustificado en los precios generó un malestar generalizado entre los usuarios del terminal terrestre, quienes expresaron su descontento ante la falta de control y la especulación por parte de las empresas de transporte.
Ante esta situación, se recomienda a las personas que aún no han comprado sus pasajes, hacerlo con la mayor anticipación posible y comparar precios entre diferentes empresas para evitar pagar tarifas exorbitantes.
Un fin de semana marcado por la amargura
Lo que debía ser un fin de semana de unión familiar y celebración se vio empañado por la avaricia de algunos y la falta de control por parte de las autoridades. Se espera que esta situación sirva como un llamado de atención para que se tomen medidas que protejan los derechos de los usuarios y se evite que este tipo de abusos se repitan en el futuro.